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El clavadista mexicano Osmar Olvera logró lo que parecía imposible: vencer a los representantes de la potencia mundial en clavados y consagrarse campeón del mundo en el Campeonato Mundial de Deportes Acuáticos de Singapur.
Con apenas 21 años, Olvera firmó una actuación extraordinaria en el trampolín de tres metros, donde sumó 529.55 unidades, suficientes para dejar atrás al cuatro veces medallista olímpico Zongyuan Wang y a Yuan Cao, otro histórico del deporte chino. El triunfo rompió una racha de diez campeonatos mundiales consecutivos ganados por clavadistas de China.
Acompañado de su entrenadora Ma Jin, Olvera no solo se colgó el oro, sino que también acumuló cuatro preseas en total en esta edición del Mundial: una de oro y tres de plata, consolidando su estatus como una de las máximas figuras del deporte mexicano actual.
El medallista de bronce en París 2024 cierra con broche de oro su participación en Singapur, sumando ya ocho medallas en Campeonatos del Mundo y dejando claro que su ambición es superar a Joaquín Capilla como el mexicano con más preseas olímpicas en la historia.